viernes, 24 de mayo de 2013

HUIDA DE JACOB



HUIDA DE JACOB     Gé 27-28



Nos quedamos cuando Jacob engaña a su padre Isaac para obtener la bendición. Con ella heredaba todas las propiedades y sus  hermanos pasarían a servirle. Podemos  imaginar el enfado de Esaú, que pasó de amo a siervo. Así que pensó en matar a su hermano y este, avisado por Rebeca, su madre, se marcha a casa de su tío Labán. Se fue a Padan Aram (campo de Aram), territorio  que está al norte de  Aran Naharaim, que va a lo largo del río Eúfrates. Allí tomaría esposa, no como su hermano Esaú que se casó con mujeres hititas. Jacob se casará con cananeas.
N. Guy  Brenet s.XVIII

En esta obra de Guy Brenet, pintor del clasicismo barroco (s. VIII) nos muestra al personaje central, Isaac, bendiciendo a Jacob, sobre el que cae la luz destacándolo. En un primer plano  está Jacob, con los colores que le destaca como heredero de la Alianza. El rojo, símbolo del amor, del que está cerca de Dios, como Jesús, del que está preparado para el sacrificio. También es el color de los netamente humano, de la fortaleza y determinación. Es el color de la realeza. Mientras que el azul, representa la lealtad, la confianza, la sabiduría, la inteligencia, la fe, la verdad y el cielo eterno. En el clasicismo barroco predomina el dibujo sobre el color y aunque  a este autor le quedan reminiscencias rococó por los gestos exagerados, contiene tres planos sucesivos propios del estilo. Esaú  sorprende a Jacob  traicionándole e Isaac, ciego,  es engañado. Todas las prendas que le cubren son blancas, color de la inocencia, la pureza, el de la perfección. Por eso se le pone a Jesucristo en la resurrección

Seguimos. Nos quedamos en que Jacob sale de Berseba y marcha a casa de su tío Labán, hermano de su madre. Por el camino se echa a descansar.

Rafael Sanzio  s. XV-XVI
La Biblia ha sido fuente de inspiración para los artistas de todos los géneros y de todos los tiempos. Y es que, en su momento, era la única  manera de información visual para los creyentes, sobre todo para una población analfabeta. No sólo Miguel Ángel con la Capilla Sixtina pintó temas bíblicos, En este caso Rafael Sanzio, en el siglo XVI, también realizó obras basadas en temas del AT. Como  “El sueño de Jacob” en la  Loggia en el segundo piso, Palazzi Pontifici, del Vaticano. Apasionado del clasicismo griego, tenía gran habilidad en el dibujo y en la pintura. Dominando la técnica  “al fresco”. Con influencia de Miguel Ángel, sus figuras son menos musculosas, más delicadas  y de gran sensibilidad.
Aparece Jacob con la cabeza apoyada en una piedra en pleno sueño, en el que todo es oscuro, pesado, temeroso. Hace poco que ha salido de su tierra huyendo, ha engañado y raicionado. A la izquierda, aparece una escena nocturna con un redil roto. De toda esa turbación aparece Dios, sobrevolando el cielo que se dirige a Jacob y le promete su protección, a él y a su descendencia. Toda la escena es suave y tranquila. Dios le devuelve el sosiego.


Como lo presenta J. de Ribera,  s. XVII, representante del tenebrismo español, aunque evolucionó hacia un estilo más ecléctico, en el toma ideas de otros estilo y, sobre todo, más luminoso. En el siglo XVII fue un tema muy pintado. Aquí se muestra a Jacob como un sencillo pastor, nada nos indica que es un patriarca hebreo. La sencillez de la escena contrasta con al minuciosidad de la obra. De hecho, con las nuevas tecnologías podemos observar hasta la parte más pequeña de la pintura y, por lo tanto apreciar la precisión de la misma. Por ejemplo el ojo de Jacob sólo un maestro puede conseguir, a tal tamaño, la expresión y las sombras de los párpados. La composición en diagonal propia del barroco se marca en esta cuadro con  la nube  dorada que baja del cielo, el escorzo de su pierna y  los pliegues de su túnica. Es la presencia de Dios. Una forma especial de plasmar la “escalera” con la que sueña el protagonista  a través de la cual Yahvé la habla  a Jacob. Aunque Ribera comienza siendo tenebrista en esta obra el contraste de luz es suave y sirve para destacar a presencia divina. Siendo barroco, la figura del patriarca es de lo más sencilla y natural. A Ribera le corresponde la famosa frase: “…España es madre amantísima para los forasteros y madrastra cruel para sus hijos». Pues se afincó en Nápoles y de donde nunca regresó.


B.E. Murillo s. XVII

Bartolomé Esteban Murillo s. XVII. Sin embargo evoluciona del naturalismo al tenebrismo. Pero en este cuadro la figura de Jacob no es la central, sino Dios a través de la escalera. Muy barroco, como le es propio, volúmenes, movimiento  el contraste de luz y sombra  en la que aquella destaca el foco que representa la presencia de Dios. Y seguimos contando textualmente:  Y llegó a cierto lugar y pasó la noche allí, porque el sol se había puesto; tomó una de las piedras del lugar, la puso de cabecera y se acostó en aquel lugar. Y tuvo un sueño, y he aquí, había una escalera apoyada en la tierra cuyo extremo superior alcanzaba hasta el cielo; y he aquí, los ángeles de Dios subían y bajaban por ella.  Y he aquí, el SEÑOR estaba sobre ella, y dijo: Yo soy el SEÑOR, el Dios de tu padre Abraham y el Dios de Isaac. La tierra en la que estás acostado te la daré a ti y a tu descendencia.  También tu descendencia será como el polvo de la tierra, y te extenderás hacia el occidente y hacia el oriente, hacia el norte y hacia el sur; y en ti y en tu simiente serán bendecidas todas las familias de la tierra.  He aquí, yo estoy contigo, y te guardaré por dondequiera que vayas y te haré volver a esta tierra; porque no te dejaré hasta que haya hecho lo que te he prometido. Despertó Jacob de su sueño y dijo: Ciertamente el SEÑOR está en este lugar y yo no lo sabía.  Y tuvo miedo y dijo: ¡Cuán imponente es este lugar! Esto no es más que la casa de Dios, y esta es la puerta del cielo. Y se levantó Jacob muy de mañana, y tomó la piedra que había puesto de cabecera, la erigió por señal y derramó aceite por encima. Y a aquel lugar le puso el nombre de Betel , aunque anteriormente el nombre de la ciudad había sido Luz”


W. Blake  s. XVIII- XIX
Poeta, pintor, dibujante y grabador inglés. Fue considerado prerromántico. Pero también fue tenido por  loco dadas las experiencias paranormales que él no se escondía contar.Junto con las lecturas de Milton, Dante y Biblia y el mundo fabuloso que se inventaba dio lugar a una obra  de simbolismo, cuerpos desnudos, fantasmagóricas figuras que presentan un mundo irreal. Su obra está llena de ángeles, de la persona de Dios Padre. Hombre muy espiritual y lleno de misticismo. Una fuente inagotable de Blake  fue la Biblia, aunque  su religiosidad no pasaba por una religión oficial. Deseaba una felicidad cósmica, universal y mística. En su pintura es completamente innovador para su tiempo y, aunque influenciado por Miguel Ángel en su estilo, se diferenciaba porque los cuerpos de Balke tienen gran flexibilidad y movimiento. El autor prefigura el “coup de fouet”(latigazo) del Modernismo que permite, al ver su obra, pensar que es muy actual. En este cuadro “La escalera de Jacob”, con trazos sinuosos, hace subir y bajar a los ángeles alabando y haciendo ofrendas a Dios. Esta escalera  que parece estar flotando en el cosmos  oscuro, sólo iluminado por estrellas lejanas, conforme asciende hacia Dios su luz va siendo más potente y cegadora, hasta llegar a ser tan potente como lo es Dios.


Chagall  s. XIX-XX
Conectado con Modigliani se quedó en las puertas de fauvismo y el cubismo. En sus obras abundan las referencias de su niñez. Su obra refleja felicidad y optimismo que se muestra en los colores intensos y vivos. Le gustaba colocarse a sí mismo y a su esposa como observadores del mundo. Es un arte inspirado en el amor, los recuerdos y las tradiciones rusas y judías. Para pintar la alegría lo hace con figuras volando, para pintar el cariño y el amor, pinta besos, abrazos, flores. La relación con el color es la del amor. En este cuadro vemos a Jacob dormido y Dios se la acerca  y le toca la frente, mientras lo ángeles suben y bajan por la escalera. Tengamos en cuenta que para ser judío pinta la imagen de Dios Padre, coda prohibida en el judaísmo. Al mismo tiempo, para figurar el cielo, un haz de luz en forma triangula ilumina la tierra desde el cielo. A veces, la paleta de Chagall,  se vuelve más sombría, con una nueva densidad de los negros y de sus contrarios, los blancos. El negro es así un contrapeso que vigoriza los sueños de la noche. El agente revelador será la límpida y viva aguada de tinta china

 
Alan  Falk  s. XX
Alan Falk, pintor inglés del s. XX Sus acuarelas de intensos colores expresan numerosos pasajes de la Biblia. El simbolismo está presente en su obra. La escalera en sí es Dios representado en la luz que emite. Lo ángeles que suben y bajan no muestran la unión del cielo con la tierra. Cómo el ser humano, aunque no sea consciente de su comunicación con Dios, lo hace de forma permanente, a través de diversas formas, como el sueño. La tierra está representada en la escena de Jacob dormido, a lo lejos la luna y el cosmos.
A partir de aquí, Jacob tiene la promesa de Dios. Le cuidará a él y a su descendencia. Pero...tendrá que purgar su traición